lunes, 20 de julio de 2015

Lo mejor es lo que viene


  
"Pasear por las tinieblas para darse cuenta de que hay cuevas en las que uno se mete sólo porque le acojonaba tanta luz."




A veces el crear problemas es el camino más fácil. La pena siempre es un tema recurrente. Sin darnos cuenta buscamos el ir reuniendo detalles feos y defectos, ahondando en las peculiaridades del carácter del otro para poder tener algo que justifique ese miedo, ese aislamiento voluntario en la oscuridad.

Si bien necesitamos de vez en cuando esa visita a los cimientos, a la rebotica, a la parte de atrás de cada uno, para valorar nuestros propios defectos y faltas, para poder salir de nuevo al bosque y saber apreciar la luz que tanto miedo nos dio.

Lo malo es que preferimos individualizar y en demasiadas ocasiones perdemos de vista lo bueno, lo que nos hizo un día darnos cuenta de que esa cueva no era nuestro sitio y que disfrutar de la vida compartida bajo la luz era lo que nos hacía realmente felices.

Caer en el error de abrir el baúl de los recuerdos simplemente para prestar atención a los malos es una falta que cometemos con demasiada frecuencia.

* * 
 
Sin duda es muy necesaria esa vuelta atrás, esa parada en lo alto del camino donde recordar lo andado ya y pensar en lo que queda de ruta, para emprenderla de nuevo totalmente convencidos de haber elegido el camino correcto. Pero no debemos perder el norte simplemente por querer satisfacer cualquier necesidad momentánea.

Porque lo verdaderamente importante es aquello que cada día hace mayor esa luz, lo que aporta un halo en el instante más sombrío.
Que merece la pena emocionarse con un abrazo, deshacerse en miradas y perder la cuenta de los besos y los orgasmos.     
Que no debemos olvidar que lo mejor es lo que viene.  
                                                                A.2015